VIDA EN TEGUS

Aunque las imágenes dicen mucho más y sé que en un blog conviene ser ágil, práctico y directo, aprovecho para resumir en unas líneas nuestra vida en este rincón del mundo tan bien tratado por la cooperación internacional y tan olvidado por sus políticos.

Vivimos en una burbuja del tamaño de una ciudad media española en la que abundan las urbanizaciones de lujo con vigilantes hasta en la sopa y muros perimetrales electrificados. Lamentablemente, a los dos días de vivir así, te acostumbras con normalidad a ver a todo el mundo con fusiles de asalto AK y a viajar en coches con los cristales negros. Parecemos unos mafiosos rusos cerrando una venta de plutonio.

Por increíble que pueda parecer, España y especialmente Andalucía tienen aquí fuertes intereses. Los aeropuertos los han hecho empresas españolas, la infraestructura del país nos la repartimos con americanos y japoneses y por lo demás, es curioso que hasta aquí ha llegado el aceite de Antonio. Asevasa también tendría un buen negocio, si tenemos en cuenta la enorme facilidad para sufrir desastres naturales que existe en casi toda centroamérica.

El Sevilla es conocido, pero nos ganan los de siempre. Barcelona y Madrid son seguidos a través de la tele con más facilidad que en España. El fútbol les vuelve loco y todavía nos recuerdan el gol que nos metieron cuando Naranjito hacía de las suyas en 1982.

Sobre bares y mujeres sólo puedo deciros que cualquier español que se pase por aquí tiene altas probailidades de verse encima de un altar en cuestión de días, pero este tema merecería todo un blog aparte.

Por último, la realidad nacional andaluza también está presente en mi vida. Imposible separarnos ni con un océano de por medio. Nuestros queridos políticos me han prestado un eficiente becario de la Junta y después de Navidad vendrán más. Chaves también suele hacer visitas y cuando voy camino del trabajo me suelo cruzar con un land rover santana, madeincadiz, con una bandera blanquiverde con el logo de la cooperación internacional de nuestra ínclita tierra. Ahí es nada.

En fin, ver si os animais a hacernos una visita al Caribe, a Tegus y a la selva tropical que hay por aquí. Un fuerte abrazo.